Siempre hemos oído que la dieta mediterránea es excelente para evitar enfermedades, para llevar una vida saludable y una alimentación variada. Pero, ¿sabes qué debe contener el plato perfecto? Ya no hay que hacer tanto caso a la pirámide de la alimentación, que seguro, todos conocemos porque ha quedado obsoleta, contamos con una nueva herramienta que es El plato de Harvard. En esta se ofrece una guía con la que podemos elaborar nuestras comidas equilibradas.

Vegetales que ocupen, al menos, la mitad de tu plato


Ya lo sabes, los vegetales deben ganar espacio a otros alimentos en tu plato, en el resto ponte harinas o granos integrales y proteínas saludables como carne, pescados, huevos, legumbres… todos los dietistas están de acuerdo. La verdura debe ser el ingrediente rey, aprovecha las que estén en temporada y así no te aburrirás. Respecto de la proteína te aconsejo las lentejas o la quinoa que te aportan fibra, y además hidratos. Es mejor que no comas proteína que provenga de procesados. Opta por la proteína que te ofrece el pescado azul, ¡su omega-3 es tan saludable… ! No te olvides del huevo, tiene un alto valor biológico y es rico, entre otras cosas, en luteína.


Evita los procesados cuando elijas tu proteína


Los vegetarianos o veganos eligen como fuente principal de proteína las legumbres. Así optan por el tofu, hamburguesas caseras de legumbres, y el hummus, entre otras, a esto puedes añadir un puñado de frutos secos o incluso una cucharada de levadura de cerveza. Puedes comer carnes y pescado, ya sea fresco o congelado y no tienes por qué elegir procesados.


¿Qué hacemos con los hidratos?


Pues en tu plato ideal también tienen su espacio, pero la cantidad debe depender de la actividad física que lleves a cabo y si quieres o no perder peso. Los carbohidratos los puedes obtener de tubérculos como la patata, boniato, yuca… o también de cereales integrales, quinoa, arroz, pasta, etc. Pero que sepas que no son imprescindibles,
Es importante que los cereales sean integrales porque en ellos encontramos el aporte de fibra en la cáscara, además de que estos cuentan con más vitaminas y minerales que los refinados. Incluso los metabolizamos más lentamente con lo que se evitan los picos de glucemia.
Llegados a este punto no olvidemos en nuestro plato algo de grasa, pero ojo, que sea de calidad. Qué mejor opción que nuestro aceite de oliva virgen extra. Puedes ponerte también aguacate o frutos secos.


¿Plato único o menú con primero, segundo y postre?

Si optamos por dos platos y postre podemos estar ingiriendo más comida de lo que necesitamos. Elige un plato único que contenga todos los tipos de alimentos que necesitas, es más práctico. Si vas a pedir tu comida al establecimiento de confianza al que sueles acudir, di que te preparen el táper con las proporciones que te hemos contado, ¡y no te olvides del postre!


¿Podemos tomar café?


Por supuesto, pero mejor sin azúcar, no tienes por qué renunciar a él. No obstante, debes saber que si eres de las personas que no les sienta bien opta por agua o infusiones, incluso un postre sano y casero. Si padeces anemia ferropénica no es recomendable que lo consumas después de tus comidas principales, tampoco el té.

El plato perfecto sí existe, ya sea que lo cocines, o que pidas la comida a tu establecimiento de confianza, opta por las proporciones recomendadas. No olvides que para no aburrirte en Fogones elaboramos nuestros menús con productos variados y de primera calidad, aprovechando los que son de temporada. Tenemos tu plato ideal, ¡ven y disfrútalo!