La dieta mediterránea es más que una dieta con alimentos exquisitos y variados. Es una forma de alimentarse que aporta multitud de beneficios para tu salud. Te voy a contar de que se compone principalmente y todos esos beneficios que te convencerán si aún no lo estás, ¡toma nota!

Alimentos que forman parte de la dieta mediterránea

La dieta mediterránea ha sido reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, así fue declarada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). En esta se mezclan los ingredientes más saludables con la forma de su elaboración perfecta. ¿Quieres saber cuáles son los alimentos que la conforman?, vamos a ello.

El aceite de oliva, no puede faltar en la dieta mediterránea

La grasa principal que conforma esta dieta es el aceite de oliva, rico en vitamina E, betacarotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le otorgan sus conocidas propiedades cardioprotectoras.

Productos de origen vegetal

En la dieta mediterránea encontramos bastantes productos de origen vegetal que nos aportan minerales, vitaminas, fibra y agua, así: 

  • Frutas
  • Verduras
  • Legumbres
  • Champiñones
  • Frutos secos

El consumo de cereales

Cereales como la pasta o el arroz, además del pan, han de ser parte de nuestro menú diario, preferiblemente los integrales. Estos nos aportan carbohidratos necesarios para que gocemos de la energía necesaria en nuestro día a día. 

Los alimentos de temporada, imprescindibles en la dieta mediterránea

Alimentos imprescindibles porque el consumo de alimentos frescos supone, además de poder disfrutar de sus nutrientes al cien por cien, un ahorro económico en nuestra cesta de la compra.  

Consumo de lácteos

El yogur y el queso no deben faltar en tus comidas. Estos te aportan las proteínas, minerales y vitaminas necesarios y, además, son beneficiosos para mantener el equilibrio de tu flora intestinal.

Carnes 

Consumidas con moderación deben ser parte de tus menús diarios porque aportan beneficios necesarios para tu salud. 

Pescados y huevos

El pescado te aporta beneficios cardiovasculares y los huevos son ricos en proteínas. Consumidos varias veces por semana son productos saludables. 

La fruta 

Aprovechar la fruta de temporada es la mejor elección que puedes hacer para tus postres y, como merienda, otra de las opciones ideales. 

El agua, ideal para una dieta saludable

Está en la bebida más saludable por excelencia, aunque elegir vino, tomado con moderación, en tus almuerzos tiene también sus beneficios. 

Beneficios de la dieta mediterránea

Siempre acompañado de ejercicio físico, la dieta mediterránea tiene múltiples beneficios para tu salud, te los cuento:

Combatir el colesterol malo

Se reduce el colesterol cuando seguimos la dieta mediterránea, ya que en esta predomina el consumo de pescado y vegetales. No se abusa del consumo de carne, por lo que así controlamos más ese llamado colesterol malo. 

Cuida nuestro corazón

Esta dieta ayuda a disminuir los riesgos de sufrir enfermedades cardiovasculares, ya que reducimos la hipertensión arterial por la presencia de ácidos grasos insaturados combinados con los nitritos de los vegetales. Estos se encuentran en los frutos secos, el aceite de pescado, las aceitunas y el aguacate.

Previene los ACV

La dieta mediterránea reduce de forma significativa el riesgo de padecer accidentes cardiovasculares por ser rica en frutos secos y aceite de oliva.

Ayuda a prevenir problemas estomacales

Los vegetales verdes ricos en nitritos combinados con polifenoles antioxidantes, presentes en las manzanas y el vino tinto, hacen de protector gástrico. Con esto se previenen las dolencias estomacales.

Contribuye a la disminución del riesgo de padecer Alzheimer y demencia

Los huevos son unos de los productos más saludables que encuentras en la dieta mediterránea. La ingesta de estos mejora las funciones cerebrales y por el buen funcionamiento de los vasos sanguíneos se puede prevenir estas enfermedades. 

Control de la diabetes

Como esta dieta mediterránea es baja en grasas, por lo que contribuye a controlar la diabetes tipo 2.

Mantiene la obesidad a raya 

El consumo moderado de carbohidratos, azúcares y bebidas pasteurizadas o gaseosas, y la ingesta de vegetales y proteínas, ayuda a controlar tu peso e incluso deshacerte de esos kilos de más. 

Contribuye a prevenir el Parkinson

Los alimentos que conforman la dieta mediterránea contienen multitud de productos antioxidantes, por lo que ayuda a reducir las probabilidades de padecer Parkinson.

Protege tus huesos

Seguir la dieta mediterránea te ayuda a fortalecer los huesos por la presencia de alimentos ricos en calcio. Esto hace que se reduzca el riesgo de sufrir fracturas. 

Te aporta más agilidad

Comer saludable hace que te sientas más fuerte y ayuda a tus músculos y esto es algo que se consigue con la dieta mediterránea. 

Tiene propiedades que combaten el envejecimiento

Por la abundancia de antioxidantes y calcio presentes en esta dieta, tu salud mejora y con ello disminuyen las probabilidades de sufrir enfermedades graves.  

Ya ves que son bastantes los beneficios de seguir la dieta mediterránea. En Fogones lo tenemos claro, es deliciosa y saludable y, además, siguiéndola, elaboramos nuestros menús diarios para cuidarte y para que disfrutes comiendo.